Informe PISA: ¿Diagnóstico sin tratamiento?.

Por las polémicas, los debates y las opiniones suscitadas, el informe PISA parece más un arma arrojadiza que cada tres años pone la OCDE en manos de políticos, sindicatos, colectivos de profesores, padres, alumnos... para que se culpen y/o disculpen, que un instrumento que ayude a mejorar lo mejorable en la Educación.
Sin entrar a analizar si las pruebas administradas a los alumnos miden lo que dicen medir o si son equiparables los resultados conseguidos por los alumnos de unos países con los logrados por los de otros y dando por cierto que es el informe más completo y más “popular” de cuantos se elaboran sobre rendimiento en comprensión lectora , ciencias y matemáticas en el mundo, creo que debemos poner los puntos , no sólo sobre las ies, sino también sobre las jotas y aconsejar a los expertos de la OCDE que, una vez sabida (¿diagnosticada?) la situación, propongan el remedio, ya que si no lo hacen, lo que consiguen es generar malestar. Es como si fuéramos al médico a hacernos un chequeo, nos diagnosticara varios males y no nos propusiera ningún remedio. En ambas situaciones, sin propuestas de solución, es mejor no saber nada.