el cazurro ilustrado

10 julio 2006

Riego a manta.


Ayer no hubo post, porque este sol abrasador hace que los prados necesiten mucha cantidad de agua para producir “el otoño” que pacerán las vacas en ese tiempo. Tuve que ayudar a mis vecinos a hacer “el puerto” con el que tomamos el agua del río y la dirigimos, por canales ancestrales, hacia los prados. El método empleado es el de “inundación” o “riego a manta” que consiste en cubrir con agua toda la superfice a regar. Podemos utilizar este método porque, a pesar de la sequía, no nos falta agua en la montaña; además, la que se pierde, retorna al cauce de río y se incorpora a otros canales de riego.
No es que ignoremos otras formas de regar, como el riego por aspersión o el riego por goteo o el riego subterraneo; es, simple y llanamente, que hemos acostumbrado a nuestras tierras a recibir agua en abundancia cuando la necesitan y sin este mal hábito no producirían como producen. Ni siquiera las precipitaciones pluviales nos libran de regar. “· El agua del cielo no quita riego”.