Los españoles y las lenguas extranjeras.
De vez en cuando retorna la noticia a los medios de comunicación, para recordarnos que España es uno de los países de la Unión Europea con menor dominio de idiomas extranjeros, junto con Hungría, Portugal, Bulgaria y Grecia. Entre el 43% y el 75% de la población de estos países no conoce, ni habla, ni lee, ni entiende y, en algunos casos, ni falta que le hace, una segunda lengua.
Hace ya más de cuarenta años que en los diseños curriculares oficiales de nuestro país figura el aprendizaje de un segundo idioma, así que los nacidos después de 1960 hemos tenido que “aprender” o ir a clase de una lengua distinta a la materna (generalmente inglés o francés).
Dice Quintiliano en “Instituciones oratorias” que viendo Crates a un alumno ignorante, dio un bofetón a su maestro. Si no queremos ponernos tan trágicos como Crates, podemos recurrir al argumento que me daba un montañés: -yo hablo siete u ocho idiomas, pero todos en español.
Dice Quintiliano en “Instituciones oratorias” que viendo Crates a un alumno ignorante, dio un bofetón a su maestro. Si no queremos ponernos tan trágicos como Crates, podemos recurrir al argumento que me daba un montañés: -yo hablo siete u ocho idiomas, pero todos en español.