el cazurro ilustrado

22 diciembre 2005

Deseos y esperanzas


La Navidad es feliz, pero los que transcurren por su tiempo no lo son tanto porque los accidentes de la fortuna son abundantes y , a veces desfavorables, interrumpiendo y empañando esa supuesta felicidad. Desde este blog, en estas fechas ritualizadas de deseos, quiero que los que me leen y los que no; que los que se creen felices y los que piensan lo contrario, tengan en cuenta que no es lo mismo hacer algo para quitar consecuencias negativas que por obtener logros o consecuencias positivas; que no es lo mismo vivir librándose de problemas ( despejando balones) que alcanzando metas (marcando goles); que la ansiedad establece una correlación con algo futuro temido y que la alegría lo hace con algo apetecido; que la esperanza supone, en contraste con la depresión, una apertura de horizonte o futuro cuyo recorrido hacia adelante se siente ligero ( alegre) donde lo presente remite a lo ausente de alguna manera presentido. No estaría de más, tanto para aquellos que caen en el panfilismo de la felicidad por decreto, como para los que se abandonan en la amargura de la desolación depresiva, tener presente “las tres bes” y el “sentido de la vida”.