el cazurro ilustrado

13 septiembre 2018

Cuando la depresión era acedia y la medicina religión.


“Muchas veces nos entristecemos y padecemos algún asco a los preceptos, exhortaciones, consejos, oraciones y otras virtudes, y esta tristeza es la que se llama acedia o pereza. Nace esta acedia del demasiado apego a las cosas temporales y deleites de la vida presente, y del miedo y horror que contemplamos en el camino de la bienaventuranza. Es pecado mortal de su naturaleza la acedia, porque es contra la caridad propia; puede ser venial cuando falta el lleno consentimiento, y cuando la materia es leve, v. g. cuando el hombre se entristece, no del bien espiritual porque es espiritual, sino es por razón de alguna circunstancia de lugar o tiempo, como el que siente ayunar en día de fiesta, o decir Misa a las doce, u otro motivo accidental. Finalmente, cuando la acedia es del bien espiritual absolutamente, y con lleno consentimiento, siempre es pecado mortal.”

Diego de Torres Villarroel: “Tratados físicos, médicos y morales, vida natural y católica”. Tomo IV. 1794