Hablan de la creación del mundo como si la hubieran presenciado.
“Los filósofos son gentes muy particulares. Hablan
de la creación del mundo como si la hubieran presenciado. Definen lo absoluto
como si hubieran estado durante años enteros frente a frente de esta
abstracción; hablan de la nada y de la existencia del yo y del no yo, del por
sí y del en sí, de la universalidad y de la individualidad, de la sociabilidad,
de las nociones puras y simples, de la
incógnita X, &c., con tanta seguridad como si un plano celeste les
hubiera facilitado los más exactos pormenores sobre estas cosas y estas ideas.
Torturan y embrollan las nociones y definiciones más sencillas con una balumba
de palabras ampulosas y sabiamente combinadas, pero vacías de sentido e ininteligibles,
de manera que el hombre de buen sentido no sabe por dónde anda en semejante
laberinto”
Luis
Büchner 1824-1899, Fuerza y materia