¿Es infame el que no participa y no toma partido por alguna postura?
El domingo, 25 de
mayo de 2014, se celebran las elecciones al parlamento europeo. Se prevé
una alta
abstención por el desafecto del
pueblo llano con los políticos, entre otras razones. Pero ya decía Antonio Machado a través de Juan de Mairena: “haced
política, porque si no la hacéis
vosotros, la harán en contra vuestra”. Y siguiendo con “Vidas paralelas” de Plutarco, cuenta: “ De las demás leyes de Solón es, sobre todo, singular y extraña la
que disponía que fuese notado de infamia el que en una sedición no hubiera sido
de ninguno de los dos partidos. Era su objeto, según parece, que ninguno fuese
indiferente o insensible en las cosas públicas poniendo en seguridad las suyas
propias y lisonjeándose de no padecer y sufrir con la patria, sino que desde
luego se agregara a los que sentían mejor y con más justificación, y les diera
auxilio, corriendo riesgo a su lado, en lugar de esperar tranquilamente a ver
quién vencía”.
Aunque las leyes españolas no obliguen al voto, las leyes de
Solón nos tildarían de infames por ser indiferentes e insensibles a las
cuestiones públicas y esperar tranquilamente
a ver qué pasa, como si estas elecciones no fueran con nosotros;
pero bien miradas, podrían semejar una
sedición entre dos posturas bien definidas y encontradas y de
las que ya os hablé en otras ocasiones: ricos/ pobres; protestantes/católicos;
derecha/izquierda; norte/sur; razón instrumental/razón comunicativa……. Tomad partido por unos o por otros, arriesgad, luchad por el derecho a ser un mono católico frente
a los chimpancés protestantes del
norte de Europa; si no vosotros, yo si lo haré.