el cazurro ilustrado

24 abril 2011

Rasgos distintivos de la semana santa.


La semana santa  tiene, al menos  aquí en León, unos  rasgos distintivos que se  convierten en estímulos  discriminativos para unos comportamientos  que  ya no aparecerán  hasta la próxima semana santa, o de aparecer serán  tenidos por extemporaneos e  incluso algunos de ellos  por  ilegales. Así  el simple juego de las chapas en el que se lanzan dos monedas al aire y  hay que apostar a caras  o a  cruces, simulando  cómo se repartieron los soldados romanos  la capa de Cristo; o las procesiones  con los pasos representado  diferentes  escenas de la pasión, portados por  braceros, acompañados de  los papones;  o las torrijas, típico dulce de estas fechas; hasta  las televisiones, tanto públicas como privadas, incluyen este tipo de estímulos: no hubo cadena que no emitiera alguna  superproducción  como “Espartaco”, “Los 10 Mandamientos”, “La historia más grande jamás contada”, “Ben-Hur” “Quo vadis” o, ya para terminar, la limonada que sirven en todos los bares  y que por cada una que se toma  simboliza  un judío  que se mata, de los  que condenaron a Cristo…. Toda esta estimulación nos indica el tipo de comportamiento a mostrar para obtener las oportunas consecuencias. Estuve  viendo  “ Los diez mandamientos”,  dirigida por Cecil B. DeMille, con  Charlton Heston, Yul Brynner, Anne Baxter, John Derek, Edgard G, Robinson, Ivonne De Carlo, Nina Foch,  Cedric Hardwicke, Vicent, Debra Paget y John Carradine  en los papeles principales, que ganó un Oscar  a los mejores efectos especiales y obtuvo otras seis nominaciones; después de  admirar  los efectos especiales, los cien mil extras  para mejor ambientar las escenas, le pregunté  a  mi suegro   sobre las  escenas que estaba viendo y me dijo: “ cuánta  han tenido que comer esas mulas para tirar de los carros como tiran” . Y es que cada uno da significación  a los estímulos, como le viene en gana.