¿Sobra lo que falta?.
El cartel que me encontré en la puerta de la iglesia de Nocedo de Curueño, se podría poner (si no está puesto ya) en la mayoría de las puertas de las iglesias de los pueblos de esta montaña leonesa. Resulta que lleva la institución católica notando y quejándose de la falta de vocaciones hasta que, con motivo del día del seminario, realiza cada año una campaña para conseguir nuevos seminaristas. Desde el 2004 ha lanzado eslóganes originales y efectivos (“El sacerdote, un don de Dios para el mundo” (2001); “Una vida apasionante” (2010); “Apóstol por gracia de Dios”(2009); “Si escuchas su voz” (2008); "Sacerdotes, testigos del amor de Dios" (2007); "Por Cristo y por los demás: hazte cura" (2006); "Generosos y entregados... como María" (2005);"Hay más alegría en dar que en recibir" (2004)). La conferencia episcopal, en una nota de prensa, dice “en el curso 2010-2011 se ha producido un aumento del 14,83% en el número de seminaristas ordenados en España. En concreto, se ha pasado de 141 en el año 2009 a 162 en el 2010. Asimismo, se está produciendo en los últimos años un incremento en el número de seminarios, tanto mayores como menores”.
Pero en la montaña, si hace años lo que escaseaban eran los curas, ahora lo que faltan son feligreses. Rara virtud la de los montañeses que consiguen que sobre lo que falta.