Tienes un cabreo de sesión continua.
" No puedo explicarte lo que es el mono, aunque me lo
pides. Es inexplicable e inconcebible para quien no se lo ha apechugado. Es la
tortura y el castigo hechos a la medida de la infamia del vicio. La nariz se te
forra de murciélagos. Te salen litros de moquillo líquido que sabe a rayos. La
saliva te llena la boca de un caldo de orín fermentado con ácido sulfúrico.
Todo te duele con diez tanques. Los riñones se te infestan de ratas que te
carcomen los nervios. En las articulaciones de las rodillas, de las muñecas, de
los codos, de los tobillos, para qué contarte? En cuanto te mueves y en cuanto
no te mueves... da igual... Se te mete la cremallera de pinchos para arriba y
para abajo. Se te ponen los nervios de rejones. Tienes un cabreo de sesión
continua. La cabeza cencerrea y se te rompe la crisma erre que erre. El
insomnio te encapota 24 horas por día. Ni soñar con dormir. Las noches son
peores que los días, y viceversa. Se me olvidaba decirte que los ojos se te
salpimentan solos y con chile negro. Lagrimeas vinagre y bilis sin poder
llorar. Desde la punta de la cebolleta hasta la campana de la molondra se te
pone la carne de gallina sin necesidad de condiciones atmosféricas. "
Fernando Arrabal (1932)
Pateando paraísos
En la foto: Antonio y Toño.