el cazurro ilustrado

04 febrero 2014

Día mundial contra el cáncer.

Leo en “Tratado de medicina práctica moderna” que presenta la clasificación, causas, síntomas, pronósticos y el método  perfeccionado de curar  enfermedades de todos los climas, escrito por Roberto Thomas, doctor en medicina de la universidad de Edimburgo, traducida del inglés al castellano, por el Dr. D. Celedonio Martínez Caballero, de la Academia de Medicina de Madrid , del liceo Médico de Londres, de la sociedad médica  de emulación de París  y de otras varias nacionales y extranjeras (Madrid 1824):
“Durante el estado oculto del cáncer, se recurrirá a las frecuentes sangrías locales por medio de las sanguijuelas, a las aplicaciones saturninas, &c. ; se mantendrá el vientre libre con los suaves laxantes , recomendando un régimen vegetal; y si estos medios no bastan, se practicarán ligeras fricciones mercuriales sobre la parte enferma, usando al mismo tiempo los cocimientos sudoríficos.
En el principio de la enfermedad se han conseguido muy buenos efectos con el uso del mercurio en forma de ungüento, o con la administración del calomelano y de los antimoniales en pequeñas dosiscomo también con las sustancias vegetales diaforéticas, como el guayaco , el sasafrás, la zarzaparrilla , el mecereon , &c.
La cicuta ha sido muy usada desde el tiempo de Stork   y algunas veces con bastante ventaja. Pero para obtener sus buenos efectos con más seguridad, debe emplearse antes del período de la ulceración , y principiar siempre por una dosis muy corta , que se aumentará gradualmente hasta que experimente el enfermo alguna indisposición en la cabeza o estómago, como náusea o vértigo, a cuyo tiempo debe disminuirse la cantidad administrada, o abandonar enteramente su uso. La preparación más activa es el extracto, que puede emplearse en píldoras de dos granos, empezando por una hasta diez o doce en las veinte y cuatro horas.
La belladona y el hyosciamo son medicamentos de la misma clase que la cicuta, y cuyo uso ha sido ventajoso en varios casos en los tumores e induraciones glandulosas, que se hallan inclinadas a hacerse cancerosas.
Si no producen algún alivio los medios referidos, y antes al contrario el tumor se acerca con rapidez a la supuración, el único remedio eficaz a que debemos recurrir es la entera extirpación, si el tumor es movible y no se halla adherido a parte alguna huesosa, y si su situación hace practicable la operación.”  Esto hace 190 años.
Hoy una  ola de afirmaciones exageradas sobre el poder de la medicina preventiva forma parte del mismo fenómeno. Queremos creer que si nos comportamos bien, si comemos los alimentos adecuados y con moderación, si hacemos ejercicio de manera habitual, etc, se nos recompensará con una vida larga y saludable. Sin embargo (...) no necesariamente es así.” Iona Heath, Ayudar a morir, Katz, Madrid 2008, p. 24

“El cáncer es un recordatorio perturbador del núcleo inexorable de azar, incertidumbre e injusticia --todas ellas cuestiones de valor-- de la condición humana.” Arthur Kleinman citado en Iona Heath, Ayudar a morir, Katz, Madrid 2008, p.