el cazurro ilustrado

08 septiembre 2010

¿Censura?.



En alguna de las oscuras  épocas pasadas de nuestra historia, en las que ya  era costumbre  denegar  derechos y vetar libertades, fueron  prohibidas por la censura eclesiástica la obra de Voltaire, titulada “La doncella”, un poema épico burlesco en  el que se reía  del mito más arraigado en la Francia de su época, Juana de Arco,  y la de Helvecio, “El talento” en la que  el autor mantenía que  el talento no es más que un conjunto de ideas nuevas que carecen de la extensión e importancia necesarias para merecer el nombre de genio. Se comunicó la decisión a  las autoridades de todos los pueblos para que recogiesen y neutralizasen  todos los ejemplares que en ellos fuesen hallados. Como consecuencia, el alcalde de un pueblo de esta montaña  contestó:  “Conforme a la orden recibida, he practicado el más escrupuloso reconocimiento, y no he encontrado  en todo el pueblo ni doncellas, ni talentos.” Y es que en ser diligentes, cumplidores y obedientes con la normativa, no gana nadie  a las autoridades de la montaña.